Para los amantes del ejercicio y de los bellos lugares, la compañía Vision Cruceros propone un viaje en barco muy divertido: unas vacaciones muy saludables por el Mediterráneo.
Vision Cruceros ha preparado un completo programa de actividades repartidas durante los ocho días de travesía: seminarios de nutrición, clases de baile, yoga, spining, pilates… Una experiencia única, la manera más divertida de estar en forma y disfrutar del Mediterráneo y de sus sugerentes paisajes.
Vision Cruceros, que acaba de estrenar su temporada de cruceros por el Mediterráneo con salidas desde Barcelona, presenta su crucero temático del Fitness.
Durante ocho días los pasajeros del Vision Athena podrán participar en las numerosas actividades que tendrán lugar en el barco mientras disfrutan de un espléndido y primaveral Mediterráneo. La oportunidad perfecta para huir del estrés y aprovechar para cuidarse por dentro y por fuera.
Un grupo de monitores y profesores titulados dirigirán las clases que conforman el programa:Baile: La diversión está asegurada a ritmo de Latino, Jazz, Salsa…Pilates, Yoga y Body Balance: Para aprender a respirar, a entrenar el cuerpo y relajar la mente.
Spining: Para pedalear y perder calorías al ritmo de la música.
Body Pump: La manera más rápida de tonificar todos los músculos y mejorar la forma física.
Body Combat: Para llenar el cuerpo de energía combinando música y artes marciales.
GAP: Una clase de tonificación dedicada a glúteos, abdominales y piernas.
Step: Lo mejor para mejorar la coordinación y quemar calorías subiendo y bajando escaleras.
El programa se completa con un seminario de nutrición cuyo objetivo es aprender a beneficiarse de la potencialidad de los alimentos, mejorando la salud, el bienestar y reduciendo el riesgo de enfermedades.
Fascinación Mediterránea, el escenario perfecto:
El Mediterráneo será el escenario de este Crucero del Fitness durante ocho días y siete noches. El buque Vision Athena realizará el itinerario Fascinación Mediterránea, un viaje de ensueño. La primera parada del recorrido es Túnez, con sus bellas playas y su riqueza cultural. A continuación se detiene varios días en Italia para descubrir Nápoles, donde descansa el Vesubio; Civitavecchia, desde la que se puede acceder a la legendaria Roma; y Marina Carrara, en plena Toscana, para visitar Florencia. Termina en Francia, concretamente en Niza, la joya de la Costa Azul.
Via/ El Imparcial