Costa Cruceros dice que tiene un plan para extraer el combustible del barco y otras sustancias contaminantes vertidas por el barco durante y después del accidente y que en 2 meses se sabrá qué empresa se ocupará de desencallar el navío.
Toda esta operación es muy delicada debido a que el Costa Concordia aún tiene en su interior 2400 toneladas de combustible, y el temor es que se genere un desastre ecológico en la zona si el rescate no se realiza cuidadosamente.